09 agosto, 2019

Voyeur

del libro Autogestión de las cosquillas

Estoy estas aleatoria invocada convocado por nuestro deseo en el metro
quiero verte las tetas sin que me veas
y también mirándome
en consenso calientes
quieres verme los huevos

Durante Eros Noches
Fotografía: Laura May Grogan
tu forma quiero ver pegada
a tu ropa
y saborearla

imaginar
quieres mi peso en tus manos
y su textura desde tus ojos hasta mis ojos

mirarte miráme
nos
imaginamos en
y desde
tus 4 labios hasta mis 12 labios
cómo mascan lo que mascan
cómo chupan lo que chupan
cómo suave y rápidamente lamen
lo que en ellos ha de lamerse
lo que ha de ser
salivado
saludado por mi tu lengua

cada une en su sitio voyeurs sentimos
el rumbo la rumba de tus mis comisuras comienzos
caminando
royendo
rayando
haciendo tigre
lo que rajado ya es felinamente

de puro arder
de puro vernos

de pura pureza en este goteo
morena
niebla de cuerpo prieto bello
labios gruesos llenos de ti
se te marcan

centímetros de distancia y tensión
que bellísimas placer y fuerza líneas
que suaves y unidas a mí y mi dureza
te dicen te nombran mi tamaño

culito parado ágil
qué bonita eres cuando tiemblas de gozo
rizada tienes la melena
y rizada el aura de tu vagina

que quiero que quieres
el tiempo siguiente este tiempo
detenida
profunda
telepáticamente
en todos los tiempos futuros posibles juntes
más juntas y juntos
y más cachondas y hondos

pensamos en una fiesta igualmente llena que el vagón
una fiesta de tus amigues y mis amigues
donde vamos a la cocina por las cervezas
que somos nosotres puestas al punto para bebernos
espumar
nos bebemos la espuma pegades al congelador
y sus calcomanías de bandas de punk que no existen

y un calendario con la fecha de mi nacimiento señalada
como te señalo
con mi pito

como la señal que enseñas con tu nacimiento
moviéndolo
masajeándote con las piernas

mientras soñamos
que es la misma fecha 
en que asisto a un consultorio donde eres el doctor y la doctora
y me atiendes un padecimiento
que es en realidad mi verga o la tuya mi pucha o la tuya
que no pueden hablar y se han hinchado
en minutos
mirándonos de una estación a otra

mientras pensamos en el mercado donde compras tus frutas
antes de morderlas
antes de que te despache y nos penetre pregonando las ofertas y te ponga el pilón
pa´ que regrese mi marchanta
a comprarme
a dejarse ver el culo
a verme el culo
a compartir su energía
que fueron horas de vida trabajando
reunidas en un billete
a cambio de horas de mi vida
que ahora son sabores dulces entrando a tu lengua
y lenguándose se esparcen

aunque aquí
aquí
no se vuelve
aquí son puras coincidencias
aquí nos negociamos a parte
aquí sí nos atrevemos a vernos ricamente de derecha a izquierda
y comenzamos a mirarnos unes a otres en consenso
nos saboreamos
nuestras cuerpas y cuerpos
calientes
aquí se me pone dura y lo miran
aquí se les entibia el río y estoy mirando
aquí
huele delicioso
y respiramos ahora mismo al mismo tiempo
y respiramos ahora mismo al mismo tiempo

y lubricantes bajamos del metro
lo mismo que bajamos de este poema mojades
y las personas que van entrando sospechan
pero esa sospecha que huele
sólo está en su pensamiento.